"Muerte y vida". El glorioso regreso de "Avalanch"
¡¡¡Buenas noches, mis leales lectores!!!
El Paladín de Khorne os envía saludos, y desea que hayáis pasado una feliz semana. Hoy, jueves 17, en vísperas del fin de semana, he decidido dedicar este espacio a hablar del que es el nuevo disco del grupo asturiano (sí, amigos mío; vástagos de nuestra Sagrada Tierra) "Avalanch", uno de los máximos exponentes del "heavy metal" español.
Ante todo, unas breves pinceladas acerca de la evolución histórica de este grupo. Nacido en 1993 en Posada de Llanera (Asturias) de la mano de Alberto Rionda, Francisco Fidalgo y Víctor García, y tras lanzar su primer disco en 1992 ("La llama eterna"), "Avalanch" comenzó una carrera ascendente que le llevó a convertirse en uno de los grandes nombres del "heavy" patrio. Tras años de éxitos, con la partida en 2001 de su más afamado vocalista, Víctor García (que pasaría a convertirse en uno de los creadores de "WarCry"), el grupo incició un lentro proceso de decadencia, motivado, en gran parte, por la gran diferencia existente entre el estilo del propio Víctor y el de su sucesor, Ramón Lage, al que el público no se acostumbraba. Finalmente (y afortunadamente, me permito añadir), con la publicación de su nuevo álbum "Muerte y Vida", parece ser que "Avalanch" vuelve a cosechar el apoyo de los fans, que por fin han visto cómo el estilo del grupo se adapta a las nuevas circunstancias de sus miembros.
Precisamente es este nuevo disco del que aquí me dispongo a tratar. Puesto a la venta el 5 de noviebre de 2007, "Muerte y Vida" ha marcado un antes y un después en el modo de composoción del grupo asturiano. Es, a mi humilde juicio, un álbum de gran calidad, mucho más equilibrado que aquellos que han decorado las estanterías de las tiendas de música desde hace años, y que, en cierto modo, recupera el sabor épico de sus mayores éxitos, aunque abandonando el estilo grandilocuente de discos como "El ángel caído" o "Las ruinas del Edén". El ágil ritmo y la gran potencia de las composiciones anteriores han dejado paso a un estilo más tranquilo, más intimista, mucho más acorde con la voz de Ramón. Las letras, muy cuidadas, tratan los que son los temas clásicos de este grupo, como la pérdida, la soledad y la muerte, aunque también la esperenza y las ansias de vivir.
Sin embargo, lo más destacable de esta nueva creación es, sin duda, la guitarra de Alberto Rionda, ese virtuoso de las cuerdas que de nuevo nos sorprende con sus ágiles notas casi imposibles de seguir, intercalando con gran habilidad los agudos más esperanzadores con las notas más graves y melancólicas, creando un efecto maravilloso en todas las canciones. Y también merece una mención el siempre correcto Marco Álvarez, batería del grupo, que vuelve a demostrar sus grandes cualidades en el manejo del mencionado instrumento.
Para concluir, os dejo dos enlaces que resultarán muy atractivos para todos aquellos interesados en conocer la nueva obra de nuestros compatriotas. El primero corresponde al tema estrella del disco, "Pies de barro" (personalmente prefiero "Aprendiendo a perder", una auténtica belleza). El segundo nos lleva directamente a la página oficial de "Avalanch", donde además de descargables con algunas de sus canciones más conocidad, podréis obtener información sobre la historia del grupo, así como sobre futuros conciertos y giras.
¡¡¡Un fuerte abrazo a todos, y hasta la próxima, chavalería!!!
http://www.youtube.com/watch?v=oI6PF2WKBFg
http://www.avalanch.net/
Actuales miembros de "Avalanch": Alberto Rionda (guitarras), Ramón Lage (voz y coros), Marco Álvarez (batería), Dany León (guitarras), Roberto Junquera (teclados), Fran Fidalgo (bajo).
1 comentario
Cristina -
Oh Grande y poderoso Paladín de Khorne!